martes, 25 de octubre de 2011

Memorias del Peter 2011


Acaban de salir de imprenta las MEMORIAS del Premio Nacional de Teatro Peter Travesi, en su vigesima versión. En unos dias seran enviados a todos los elencos participantes, junto a los certificados y ejemplares del periodico EL PETER. Saludos cordiales.

Grober Loredo Olivares - IBART

NOTAS CRITICAS: "La edad de la ciruela" - Madrastra Teatro

EL TIEMPO COMO ENEMIGO
Por: Alexia Loredo - Aliya Ellenby
Colectivo Katari

Tres generaciones de mujeres que conviven en una casa enfrentan a su manera la soledad hereditaria. Abuelas y tías lamentan o sueñan al hombre que cada una no tuvo o que perdió y que las dejó sumidas en un terrible estancamiento, en la no realización.

El tiempo es su enemigo. Corre impune, envejeciendo, paralizando a estas mujeres hasta que dos niñas se deciden a enjuiciarlo y detenerlo.

Poético, claro y con un cuidadoso montaje, este guión del escritor ecuatoriano Aristides Vargas logró encontrar al público del Peter. Dirigidas por Alejandro Marañon, las actrices de este elenco universitario demostraron un nivel bastante profesional y una propuesta interesante en cuanto a uso del espacio e imágenes. Sin embargo el manejo de voz en cuanto a fuerza y claridad estuvo débil; también hubiera ayudado un poco más de intensidad en las luces, ya trabajadas con un concepto original.

Los ambientes creados por las luces y colores permitieron un real viaje con los personajes, acompañado de música muy dulce e intensa. Como mujer, es inevitable intentar identificar en algún grado a alguna de las mujeres de allí con las de la propia familia, y preguntarse el lugar de una misma en la foto familiar de las generaciones.

El vestuario fue usado con precisión y buen gusto para definir generaciones y personajes dentro de esta familia, realmente reflejaba el carácter de cada una sin exagerar características ni aludir a estereotipos.

También es interesante el juego con la ausencia y presencia de las actrices, que sólo salen de escena cuando abandonan su casa y lo hacen en dirección al público, con un efecto mayor, pues se percibe su salida a la vida de manera muy cercana. Se podría trabajar con más variaciones en el ritmo de la obra pero en fin, más que críticas, es necesario decir que como mujeres que trabajan con jóvenes en talleres, es muy esperanzador apreciar esta calidad de trabajo escénico, tomando en cuenta que se trata de artistas que no sólo se dedicarán al teatro sino a la enseñanza.

Es así como el arte se infiltra poco a poco en todos los espacios de la vida. Igual, no hay que dejar el tiempo volar, porque no tiene vuelta atrás. Esto va para todas y todos.